Las dudas, reflexiones, esperpentos e íntimas expresiones; todas ellas con el sutil aire de locura que invade al cineasta amateur, se combinan en la proyección de los cortometrajes del Taller de vídeo, organizado por el Aula de Cine i Creació Juvenil del Servei d’Activitat Socioculturals, Trastorn Visual. Los alumnos que han participado a lo largo de las 82 horas que ha durado este sano y creativo ejercicio tendrán la oportunidad de exhibir su obra este jueves, 3 de mayo, en el Paranimf de la Universistat Jaume I a las 20.00. Todo aquel que quiera aproximarse a las primeras obras de gente que vive del vídeo como medio de expresión, y quiera sentir de cerca una sensación parecida a la de Jonas Mekas y su amigos cineastas en el Anthology Film Archives de Nueva York, podrá hacerlo de manera gratuita. Porque lo importante es vivir el arte y mostrarnos a nosotros mismos, y eso no tiene precio.
Más onírico, profundo y sumergido en los deseos de nuestro subconsciente, y los instintos de supervivencia y animalidad que forman al ser humano es la obra Animal de danza contemporánea, dirigida por Daniel Abreu. Ésta se pondrá en escena el viernes 4, a las 20.00 por un precio de 10 €. Los textos de Marina Wainer nos hablan de la línea que separa la racionalidad frente al instinto diario en el día a día. Cinco intérpretes narrarán un discurrir fotográfico de emociones, cuadros y escenas superpuestas acerca de cómo llegar al fin sin pasar por el medio. Los cuerpos transmitirán coraje, ira, pasión, descanso… emociones. Daniel Abreu ha realizado más de treinta trabajos de coreografía presentados por escenarios de todo el mundo. Además de realizar encargos para compañías como la Zawirowania Dance Theater Company o el Festival En Pe de Pedra. Entre sus trabajos se encuentran Negro (2008) y Equilibrio (2009), seleccionado en el Aerowaves 2009.
También el discurrir diario estará presente en la película del ciclo Nou Cinema de este fin de semana en el Paranimf. Polisse (2011) se adentra en la rutina cotidiana de la unidad de protección de menores del departamento de policía de París. La misma directora, Maïwenn Le Besco, interpreta a Melissa, una fotógrafa que sigue la acción del cuerpo de policía, lo que permite una mirada de distanciamiento y autoconciencia hacia las situaciones vividas. Más allá de la acción, la película trabaja la carga psicológica que soportan los agentes, sobrepasados por casos de violaciones, abusos de menores, violencia en las calles, etc. Al mismo tiempo, intenta darle un tono sentimental, rozando lo melodramático, al cruzar su historia con la de Fred, uno de los policías que se enamorará de ella, y Lino, su marido. Lo que podría haber sido un apasionante drama que sondea una compleja situación del panorama parisino, cuya propuesta inicial nos recuerda a las intenciones de Romain Gavras con su videoclip Justice, termina siendo un largometraje desinflado que bebe de productos anteriores para intentar conseguir un mayor peso dramático. Pese a su desequilibro, esta ganadora del Premio del Jurado en el pasado Festival de Cannes, y nominada a 13 premios César, tiene apuntes interesantes a los que vale la pena darles una ojeada este sábado 5 a las 19.30 y 22.30 o el domingo 6 a las 19.30 por 3€ en versión original subtitulada.
Pero, la proyección más indispensable de esta semana, y una de las que son, para el que esto escribe, de obligado visionado este trimestre, es Shame (Steve McQueen, 2011), que se proyectará, en versión original subtitulada, en el Teatro Municipal de Benicàssim el viernes 4 a las 19.30 y el fin de semana a las 19.30 y 22.30, también por 3€. La película, ganadora del Fipresci en Venecia, esta protagonizada por un Michael Fassbender en su mejor momento, ganador, de la Copa Volpi en ese mismo festival y nominado al Globo de Oro. Fassbender da vida a Brandon, un adicto al sexo que intenta superar su situación. Le acompañará su hermana suicida, una magnífica Carey Mulligan que nos ofrece una bellísima interpretación del tema New York, New York. Pues esta ciudad no había vuelto a estar tan bien retratada desde el Taxi Driver de Martin Scorsese en 1976. Brandon probará a mantener una relación sentimental con su secretaria, pero su mecánica obsesión por el sexo se lo impedirá. Un poderoso ejercicio de estilo, con una profunda y absorbente banda sonora, que se inserta en la mente y el cuerpo de un problema con el que es difícil convivir. La lucha entre el sentimiento y el deseo, en el querer y el ser que puede terminar trastornando y emocionando al espectador. Shame es la segunda película de su realizador, Steve McQueen, que, junto con Hunger (2008), acerca de la degradación física y muerte, que sufre Bobby Sands, prisionero del IRA, debido a una huelga de hambre; ganadora de la Cámara de Oro en Cannes 2008; sitúan al director en ese punto de mira de cineastas provocativos, pero a los que no puede negarse su talento.